La técnica se llama láser de plasma Plexr (Plasma Exeresis) y permite sublimar, esto es, pasar la materia de estado sólido a humo sin el paso por el estado líquido, los tejidos tratados sin causar daños al tejido circundante.
Nace de la necesidad de tratar lesiones o zonas donde es difícil utilizar el láser como son zonas vascularizadas o párpado superior.
Es la solución definitiva a arrugas, manchas, marcas de acné y diversas patologías que son un verdadero problema para mucha gente.
Se trata de una técnica apta para tratar zonas ultrasensibles sin causar cicatrices ni hiperpigmentaciones. No se produce daño térmico en la dermis a diferencia del electrobisturí.
El hecho mismo de “sublimar” evita sangrados, lesiones post tratamiento y resuelve casos que anteriormente no eran posibles (lunares o manchas en el cuero cabelludo o tatuajes de cualquier índole).
Al procedimiento le sigue un edema o inflamación transitoria y la aparición de pequeñas costritas de medio milímetro que se caen en los días posteriores. Así que tenéis que tener claro, que someterse a este tratamiento requiere que en cosa de 10-15 días a un mes tengamos que estar con unas pequeñas costras dibujadas por la zona que hemos tratado.
– Rejuvenecimiento periorbitario (párpado superior, inferior y patas de gallo; lo que llamamos “blefaroplastia no quirúrgica”)
– Rejuvenecimiento peribucal (código de barras), arrugas y flacidez del cuello, arrugas finas en mejillas (micropeeling).
– Rejuvenecimiento genital (tan demandado últimamente).
– Discromias, tanto hiperpigmentaciones (léntigos, melasmas, …) como hipopigmentaciones.
– Acné, tanto activo como cicatricial. Así como tratamiento de estrías y cicatrices (sobretodo hipertróficas) en combinación con otros tratamientos.
– Tatuajes y micropigmentaciones, éstas últimas difícil de tratar con otras técnicas por la localización (perfilado de labios, párpados, cejas, …).
– Y por supuesto la eliminación de cualquier formación dermatológica benigna (verrugas, fibromas, queratosis, …).
Al no ser un láser ni tampoco un bisturí no tenemos riesgos en los tratamientos que proponemos. Plexr trabaja en las capas más superficiales de la piel, por lo que no puede dejar cicatrices, hematomas (morados) ni sangrados. Es importante seguir el protocolo propuesto por el doctor, para evitar que el efecto del sol pueda dañar la zona tratada.
Sí. La recuperación es de aproximadamente una semana, en la que sobrellevaremos una incomodidad estética en la zona tratada. Incomodidad estética no es lo mismo que incomodidad física, es decir, no puede haber dolor.
Los resultados se aprecian de forma instantánea, mejorando progresivamente durante los meses posteriores.
Si el doctor usa la anestesia adecuada no sufriremos dolor.
El tratamiento puede repetirse una vez al mes, coincidiendo con la reepitelización de nuestra piel.
Sí. De hecho una de las virtudes del dispositivo Plexr es la capacidad de ser complementario con muchos otros tratamientos. Entre los más destacados está la posibilidad de complementarlo con la toxina botulínica en el tratamiento de las patas de gallo o con el ácido hialurónico en el código de barras.
No existe ninguna contraindicación, puesto que el Plexr puede trabajar en cualquier color de piel y en cualquier área del organismo: mucosa, cartílago, cuero cabelludo, genitales, etc